lunes, 11 de julio de 2016

"El elogio de la mirada y el maniqueísmo de los sentidos", Benjamín Domínguez.

Víctor Rosas Arenas




"El Elogio de la mirada" fue una exposición pictórica de Benjamín Domínguez el pintor del maniqueísmo de los sentidos (pintor jimenense fallecido ayer) que durante casi tres meses albergó la Galería Juan Soriano de la Biblioteca de las Artes del CENART en 2012.



       El día de ayer falleció el pintor Benjamín Domínguez Barrera (Ciudad Jiménez, Chihuahua, 31 de marzo, 1942) a los 74 años.           

       Benjamín Domínguez inició su carrera como un pintor abstracto (corriente que trabajó durante casi diez años) aunque su verdadera pasión fue realizar una revisión posmoderna del barroco.

       Posteriormente fue  respetado como uno de los neoclasicistas más modernos del país. A los 20 años de edad ingresó a la Academia de San Carlos en la Ciudad de México, donde estudió grabado con Francisco Moreno Capdevilla, y pintura con Roberto Garibay, Héctor Cruz, Nicolás Moreno y Antonio Rodríguez Luna.

       A mediados de los ochenta fue testigo de la fascinación que despertaba en el público una obra: "La pesadora de perlas", del pintor holandés Jan Vermeer plena de realismo clásico. ¿Por qué una pintura realizada hace más de 550 años tenía tanto poder de atracción?


En la Academia de San Carlos


       Ese día dudó de todo lo que había hecho hasta ese momento y decidió regresar a las enseñanzas de la Academia de San Carlos, a lo que él llama “la cocina del arte”, es decir, la práctica del arte técnico, del manejo de los colores, de los aceites, los barnices.

De su maestro Luis Nishizawa aprendió a conocer “la alquimia del arte", el uso de los aceites, los barnices, los bálsamos y el litargirio, el cinabrio, la almáciga, la sandáraca formaron parte de su nuevo vocabulario de técnicas pictóricas, desde ese momento, es decir, todo un universo que gira alrededor de un neoclasicista.

       Así surgió la serie inspirada en el cuadro "El matrimonio de Giovanni Arnolfini y Jeanne o Giovanna Cenami" (1434) del pintor flamenco Jan Van Eyck, pintura de exquisito realismo y con un cúmulo universal de simbolismos de la edad media y el Renacimiento.


El Elogio a la mirada


            A partir de esta obra, Benjamín Domínguez pintó 20 variaciones en las que traslada a la modernidad a una pareja que vivió en el año 1434, y hace que se amen, se odien y se destruyan. El elogio de la mirada, integrada por 24 obras excelsas creadas entre 1985 y 2011 fue una colección creativa histórica de Benjamín Domínguez que envolvió precisamente, en la mirada del elogio, al pintor del maniqueísmo de los sentidos, de el dolor y el gozo, de lo natural y lo sobrenatural y de las técnicas pictóricas (academicismo y abstracción). 

“El Matrimonio de Giovanni Arnolfini y Giovanna Cenami”
Jan Van Eyck. (1434)







No hay comentarios.:

Publicar un comentario