miércoles, 15 de febrero de 2012

SPAGHETTI  WESTERN:
UNA MANIFESTACIÓN DEL OESTE
Y DE LA VIDA.





 “C'era una volta il West”
Víctor Rosas Arenas
Cuando era joven, muy joven, casi un niño todavía; nací con imágenes de filmes ambientados en el viejo oeste o lo que se conoció como el género western o del oeste. Con estrellas como Gary Cooper, John Wayne, entre otros.
Bajo la imaginación manifiesta en mis juegos infantiles, ya que acostumbrábamos excursiones, en donde creaba mis propios personajes y argumentos, y  en donde salvaba a la supuesta heroína, siempre joven y hermosa, que al final se quedaba con el héroe (conmigo); aunque a veces en finales no románticos el héroe (yo) desaparecía solitario en la lejanía.

Eran… mis juegos infantiles…  portaba un sombrero y un rifle de postas, que en aquellos lejanos tiempos, era uno de los juguetes más apreciados.  Así transcurría mi imaginación y mis juegos perdidos en el tiempo… pero siempre alimentados por el cine… por el western.

       En extensos horizontes, donde los corceles recorrían largas travesías en praderas rodeadas de montañas de múltiples alturas, se ceñían las historias de hombres arrojados por el destino y arrolladores con las armas de seis... seis balas dispuestas para la muerte.  Pero no sólo eso, besaban a las mujeres sin quitarse el sombrero, y luego de luchar y pelear por las causas de ellas, o las propias, les entregaban el “botín” y se despedían de ellas, dejándolas atónitas y enamoradas.

       En parte es el final de: “Una Lunga Fila di Croci” del director: Sergio Garrone, (1969) con excelente música, a la Morricone, de: Vasco (Vassilli Kojucharov). El estelar: Anthony Steffen y la heroína: Nicoletta Machiavelli de quien, a mis 15 años, me enamoré. (Puro y total amor platónico). Aunque no fue la única, pues después surgió (amé a): Claudia Cardinale y otras.
       Parecía que mi “alter ego” era Clint Eastwood, aunque ya era muy famoso y me refugié más (subliminalmente) en la figura de Anthony Steffen (Antonio de Teffé) que era  menos conocido. Siempre pensé que era norteamericano, pero mucho después me enteré, que afortunadamente era italiano, que filmaba en su país y para entrar al mercado gringo, cambió su nombre. Al igual que en algún momento lo hizo  Morricone y otros para entrar en ese mercado, que despectivamente llamó a este género: “Spaghetti Western” y que extendió aún más el espectro de este género, pues estaba el western clásico, el de añoranza y otros desarrollados en Hollywood con directores como John Ford, Raoul Walsh y otros; la década de los 50`s es el mayor esplendor de estos primeros westerns.

       A finales de los 60`s y principios de los 70`s de Italia llegaba ahora el “spaghetti western”; y sus respectivas copias en otros países. En España se llamó “chorizo western” y en México algunos osados lo llamaron “chili western” con figuras como: Rodolfo de Anda, Carlos East, Julio Alemán, Jorge Luke, Jorge Rivero, Pedro Armendariz Jr., y los Almada, entre otros. Sin embargo, La supremacía era del “spaghetti western” de Italia, pero ya para mediados de los 70`s o antes, este subgénero estaba aniquilado.
       El "spaghetti" manejó panorámicas, pero ahora con un close up extremo hasta llegar al insert; más violento, y con las botas más sucias. Presentaba una estética inmunda, pero estilizado en el triller. Es obvio que la crítica fue muy reticente. De alguna manera, de chavo, me identifiqué más con esta nueva concepción que, Leone visualmente y Morricone musicalmente lograron crear con un nuevo lenguaje del viejo oeste: la vida en un estado de excepción.
       Muchas cintas fueron de bajo presupuesto (casi todas) y ambientaban sus historias entre 1860 y 1890 en el viejo oeste norteamericano y su puesta en escena, coincidió en mi vida.
De Morricone nadie se pone de acuerdo cuál es su mejor partitura, yo creo que todas son excelentes, pero personalmente creo que: “ONCE UPON A TIME IN THE WEST” es la mejor, es demasiado triste pero esperanzadora, llena de fe inquebrantable.
       Para finalizar me quedo con 8 filmes, 5 féminas y una música:
       FILMES: La trilogía de Sergio Leone del “Hombre sin nombre”: “Por un puñado de dólares”, 1964; "Por unos dólares más", 1965; “El Bueno, el Malo y el Feo”, 1966; “Érase una vez en el Oeste”, 1968 y “Giú la testa”, 1971 (un tiempo prohibida en México por el régimen echeverrista); “Today It`s me, Tomorrow you” Tonino Cervi, 1968; “Una Lunga Fila de Croci” Sergio Garrone, 1969 y “Il Grande Silenzio” Sergio Corbucci, 1968.

       FÉMINAS: Nicoletta Machiavelli; Evelyn Stewart; Claudia Cardinale; Ursula Andress y Raquel Welch.

       Y UNA MÚSICA: Ennio Morricone, sumamente expresionista, toca hasta la última fibra del alma, en donde un inflexible nudo en la garganta puede preceder a la última lágrima o el último tiro.
       Aquí viene una larga fila de enlaces para que puedan calibrar,  en los cilindros de una Colt 1851 Navy, el arma que utilizaba Clint Eastwood en sus filmes; aquellos filmes épicos del oeste, que entre mis 12 y 17 años fueron mis favoritos. Es decir entre finales de los sesentas y principios de los setentas, cuando pasé de niño a joven y a joven adulto. Y que de alguna manera marcaron mi vida.
      Pero no divaguen en internet. Como diría “Tunco Maclovio”, personaje central del film "chili western" del mismo título: ¡ajústense a mis enlaces!
¡Que los disfruten!



UNA LARGA FILA DE CRUCES (TEMA PRINCIPAL VOCAL):


ANTHONY STEFFEN LEGEND:


ANTHONY STEFFEN RIP:


TODAY WE KILL TOMORROW WE DIE – (TRAILER)


                                   Ennio Morricone - a - El Extasis del Oro


GIÙ LA TESTA – (SCENA FINALE...) (flashback di john prima di morire)...


CLAUDIA CARDINALE (TRIBUTE)


ONCE UPON A TIME IN THE WEST (TRAILER)


CLAUDIA CARDINALE (ENNIO MORRICONE)


Nicoletta Machiavelli



Nicoletta Machiavelli









































































No hay comentarios.:

Publicar un comentario